"Cuando comprendemos que nuestra forma de ser y de vivir; nuestros pensamientos, sentimientos, proyectos, salud y bienestar físico, ganas de crecer y salir adelante, dependen pura y exclusivamente de la determinación y el compromiso que asumamos para encaminar esos propósitos... Y, si además estamos dispuestos a dar lo mejor que podemos ser a los demás, entonces, la vida empieza a tener realmente sentido”.